Prestigioso convento de San Francisco de 1613 en las colinas de Las Marcas

Belvedere Ostrense (AN) | Superficie cubierta: 1.500 m² | Precio: 400.000 euros

En el corazón de las suaves colinas de la región de Las Marcas, entre viñedos, olivares y plantaciones de trufas perfumadas, se encuentra un lugar atemporal: el Convento de San Francisco, un complejo monástico construido en 1613 y hoy en busca de una nueva vida. Situado en el municipio de Belvedere Ostrense, en la provincia de Ancona, este antiguo convento franciscano representa una rara oportunidad para quienes deseen combinar valor histórico, belleza paisajística y diseño contemporáneo.
El convento se alza en la cima de la colina llamada Monte della Serra, en la localidad de Madonna del Sole, a unos 300 metros sobre el nivel del mar, en una posición dominante y panorámica, con una espléndida vista abierta de los montes Catria y San Vicino y del mar Adriático.
Un edificio de gran valor histórico y arquitectónico.
El complejo, construido gracias a la voluntad de Taddeo Verri, último heredero y superviviente de la noble familia Verri, es testimonio de un gesto de profunda generosidad. Al quedarse sin descendencia, Taddeo destinó parte de su patrimonio a la construcción de este convento, confiándolo a la comunidad de los Frailes Menores Reformados.
La estructura tiene planta cuatripartita y conserva la disposición claustral original, a pesar de que, tras la marcha de los religiosos, se utilizó como residencia civil durante un tiempo. El corazón del convento es un fascinante claustro central, bordeado de columnas y arcos aún intactos, que recoge el agua de lluvia en una gran cisterna subterránea, desde la que un antiguo túnel conecta también el complejo con el pueblo de abajo.

La propiedad abarca aproximadamente 1.500 metros cuadrados, repartidos en dos plantas (más un tercer nivel en una sección trasera) e incluye: los restos de la antigua iglesia, con dos muros aún en pie y cubicación totalmente recuperable.
Incluye el monasterio con celdas, refectorio, almacenes, horno y sótano, el campanario recientemente restaurado con tejado de cobre. Completan la propiedad el claustro, el canal de piedra blanca y el pozo central.

Catastralmente, la propiedad se divide en 11 unidades A/5, una unidad A/6 y la zona de la iglesia.

USOS FLEXIBLES E INCENTIVOS PÚBLICOS
El Plan Director Municipal prevé un uso libre de la propiedad, con amplias posibilidades de transformación en:
✔️ Residencia privada
✔️ Instalación de alojamiento (B&B, agroturismo, albergo diffuso)
✔️ Restaurante o centro de eventos
✔️ Espacios culturales, artísticos, profesionales o de bienestar

El inmueble está clasificado en la Subzona A2 - edificios históricos de interés, y puede ser objeto de obras de mantenimiento ordinario, mantenimiento extraordinario y restauración conservadora, sin aumento de volumen, con la posibilidad de cambiar su uso previsto a funciones terciarias, comerciales o de servicios.

Gracias a la protección de la Superintendencia del Patrimonio Arquitectónico de la Región de Las Marcas, existe también una contribución pública a fondo perdido equivalente al 35% de los costes de restauración, desembolsada por el Ministerio de Patrimonio Cultural en función del avance de las obras.

Su ubicación es estratégica y de fácil acceso.
A pesar de su ambiente reservado y contemplativo, el convento está bien comunicado con las principales vías de comunicación:
- a 20 km del mar y de la animada ciudad de Senigallia
- a 25 km del aeropuerto de Ancona-Falconara y de la autopista
- a 35 km del puerto de Ancona
- a 60 km de las famosas grutas de Frasassi
- 80 km de Urbino, 100 km de Rímini y de la República de San Marino.
La zona circundante se caracteriza por una economía rural de alta calidad y un creciente interés turístico vinculado a los productos típicos locales. En particular, cabe mencionar la producción del renombrado vino Lacrima di Morro d'Alba y la fuerte vocación trufera, que encuentra su máxima expresión en Acqualagna, uno de los centros italianos más famosos de trufas blancas y negras.